Vidas extrañas en cuerpos extraños
A veces los
elogios de presentación pueden hacer el efecto contrario en los posibles
lectores. A Anna Starobinets, una moscovita que disfruta del metro de su
ciudad, le han llamado la Philip K. Dick rusa o la alumna más aventajada de
Stephen King y Neil Gaiman, lo cual a ella le parece gracioso pero no muy
cercano a su tradición literaria que cuenta con genios como Chéjov y a
Bulgakov.
Su único
libro traducido al español, por intermediación de Nevsky Prospects, Una edad
difícil, tiene referencias a uno de los temas que más obsesionaban a Dick, la
memoria y la búsqueda de lo que nos hace ser humanos. Cosa que en estos tiempos
de redes sociales y realidades virtuales nos es común a todos. Starobinets nos
ofrece una serie de cuentos largos o novelles en donde se dan cita diversos
tipos de sucesos extraños: revoluciones iniciadas en el metro de Moscú por
oscuros habitantes de las profundidades, hormigas que intentan colonizar a la
humanidad, manchas de moho que cobran vida y provocan amor en solitarias
mujeres, hombres que olvidan una y otra vez su vida y agencias gubernamentales
tan oscuras como la propia KGB.
Anna
Starobinets comienza sus historias justo donde inician, no antes ni después. El
suceso está en marcha y nos abandona a nuestra suerte sin tener de dónde
detenernos, es como caminar en un túnel en el que una breve luz va iluminando
sólo lo que viene delante, ni un paso más. Luego, conforme continúa el relato
uno va juntando las piezas hasta terminar con toda la historia justo al poner
el punto final. Sin embargo, las preguntas seguirán ahí mucho tiempo.
Sus relatos
mezclan a partes iguales terror y fantasía, como si en el mundo real de un
momento a otro aconteciera un suceso fuera de lo común y ya sea por pena o
pereza nadie hiciera nada por hacerlo notar.
En Una edad
difícil la gente parece querer obviar el daño en el otro, lo extraño que le
sucede. Es como si de repente la comunicación comenzara a fallar y los
personajes debieran arreglarse solos en medio del caos. En uno de los cuentos
un hombre asegura recordar su vida perfectamente, sin embargo todos lo
desmienten pero sin ir más allá. El hombre continuará en ese mundo que le es
ajeno sin que la gente cercana a él haga algo por ayudarlo, como sucede con el
personaje de la historia que le da nombre al libro. Incomunicación, soledad en
una sociedad tecnologizada casi como en la nuestra.
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